Canadá I. Las cataratas del Niágara. (Niagara Falls)

El viajero inicia una serie de post sobre un país sobresaliente. Tanto desde el punto de vista democrático como sociedad, como desde el punto de vista de las maravillas de la naturaleza. País excepcional para visitar y conocer. Si vas a Toronto, primera escala que se puede realizar, con vuelos directos desde España, lo primero que se suele hacer es visitar las famosas Cataratas del Niágara.

Las cataratas del Niágara  son un grupo de cascadas situadas en el río Niágara, en la zona oriental de América del Norte, en la frontera entre los Estados Unidos y Canadá. Situadas a unos 236 metros sobre el nivel del mar, su caída es de aproximadamente 52 metros.

Comprenden tres cataratas: las «cataratas canadienses» (Ontario), las «cataratas estadounidenses» (Nueva York), y las «cataratas Velo de Novia» más pequeñas. Aunque no tienen una gran altura, son muy amplias y son las más voluminosas de América del Norte, ya que por ellas pasa toda el agua de

los Grandes Lagos. Entre las cataratas canadienses y las estadounidenses se encuentra la Isla de la Cabra, Goat Island. Un espectacular volumen de agua se arquea al llegar al precipicio como si fuera cristal líquido abalazandose al vacío de forma atronadora. Se forma entonces una nube de rocío que se eleva a

cientos de metros. El el mundo puede haber otras cascadas más altas, pero no hay otra con semejante volumen de agua, cada segundo cae el equivalente al contenido de un millón de bañeras.

De día y de noche y en cualquier época del año, las cataratas siempre impresionan. Desde la época en que el hermano de Napoleón, llevará allí a su esposa ha sido un destino donde millones de viajeros han ido a verlas.

Lo primero vas por la amplia autopista que se dirige hacia la zona de las cataratas de Canadá, o bien hacia EEUU. Llegas a las cataratas y te sorprende lo urbanizado que están los alrededores. Han aparecido casinos, establecimientos de comida rápida, moteles sórdidos, atracciones turísticas de mal gusto, etc. 

Pero aparte de esto la zona de las cataratas son una auténtica maravilla. Hay varias formas de verlas. La primera y la más cerca es hacer una excursión en un barco el famoso Maid of the Mist, pequeño pero

intrépido barco que nos acerca hasta el brumoso velo de las cataratas. El barco encara el velo de la catarata y las imágenes que ofrece son impresionantes. Es un viaje pasado por agua, pero divertido y emocionante. Llegas casi a la caída del caudal. También es un espectáculo atronador.

Otra forma de visitar las cataratas es a través de los túneles excavados en la roca que hay a media altura del risco. Casi estas detrás del velo. También se puede visitar en el puente de Whirlpoll, a través de una

pasarela de madera de 325 metros colocada sobre un caudal que fluye río abajo desde las cataratas. Y finalmente a través de un Aereo Car, Diseñado por el español Leonardo ´Torres Quevedo, teleférico que funciona desde 1916.